lunes, 14 de enero de 2008

-#3-

Un primer día se dibuja

en espumoso perfil de ave.


El olor a café

y el dulce de papaya

cortada al rocío,

definen los contornos

del sol al levantarse.


Rezuma tranquilidad

de la sombra de un gato,

que antes fue torbellino

enmohecido de luna

vibrando para el jazz

en un aletear de dedos.


Todo lo invierno ido del firmamento

se desgaja en niebla que es de leche cortada.


Los cánticos vuelan a corazón batiente, al recibir la luz de un sol como recién nacido.

1 comentario:

Anónimo dijo...

oh,hermosura de lema.
escribes bien.